Existen numerosas obras que representan este mito, y muchas de ellas fueron creadas por los artistas más destacados de su época. A continuación, exploraremos en qué consiste esta fascinante historia.
El mito
Europa, hija del rey Agenor, disfrutaba de un día en la playa junto a sus amigas cuando Zeus, al observarla, quedó inmediatamente cautivado por su belleza. Para acercarse a ella sin levantar sospechas, el dios decidió transformarse en un majestuoso toro blanco que irradiaba luz. Con esta apariencia, se aproximó y se tumbó a los pies de Europa.
Al principio, la joven se mostró desconfiada por la presencia del animal, pero, poco a poco, fue ganando confianza y comenzó a acariciarlo. Su confianza creció tanto que se atrevió a montarse sobre su lomo. En ese momento, el toro aprovechó la ocasión para ponerse de pie y dirigirse hacia el mar, llevándola consigo. Europa, aferrada a los cuernos del toro, fue transportada a través del océano hasta la isla de Creta, donde, bajo la sombra de árboles que jamás perderían sus hojas, Zeus y Europa se unieron.
Fruto de este amor nacieron tres hijos: Minos, Sarpedón y Radamantis. Como símbolo de su relación, Europa recibió tres valiosos regalos: Talo, un guardián de bronce que vigilaba las costas de Creta; un perro que jamás dejaba escapar a su presa; y una jabalina que siempre acertaba en su objetivo. Posteriormente, Zeus unió a Europa en matrimonio con Asterión, rey de Creta, quien adoptó a los hijos de Zeus al no tener descendencia propia. Finalmente, el toro en el que Zeus se había convertido fue elevado al cielo, formando parte de una constelación que ahora conocemos como un signo del Zodiaco.
El mito en el arte
Este relato ha sido representado en innumerables obras de arte, que suelen centrarse en el momento en que Zeus, convertido en toro, escapa con Europa por el mar.
Rapto de Europa, Veronés, 1580, Palacio Ducal de Venecia.
Rapto de Europa, Pedro Pablo Rubens, 1628-29, Museo del Prado, Madrid.
Rapto de Europa, Jacob Jordaens, 1615-16, Gemäldegalerie, Berlín.
Rapto de Europa, François Boucher, 1747, Museo del Louvre, París.
Rapto de Europa, Rembrandt, 1632, J. Paul Getty Museum, Los Ángeles.
Rapto de Europa, Fernando Botero, Barajas, Madrid, 2011.
Cada una de estas obras destaca el momento culminante del mito, con Zeus-toro llevándose a Europa a través del vasto mar, una escena de gran dramatismo y belleza que ha inspirado a muchos artistas a lo largo de los siglos.
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